por Juan Manuel López / De Media Chilena

Desde que asumió en la banca del seleccionado argentino, después de la bullada salida de Alfio Basile (justo después de la derrota ante Chile...¡Oh! ¡Qué coincidencia!), Diego Armando Maradona (aquí conocido siniestramente en los "bajos mundos" como "Maradroga" o "Maracoca"), nunca ha podido demostrar un nivel de juego sólido. A pesar de tener un buen comienzo, tras vencer por 1-0 a Escocia en un amistoso, el nivel de juego de la albiceleste nunca convenció del todo. Los buenos resultados seguían, pero algo pasaba que el máximo ídolo del fútbol al otro lado de la cordillera no convencía como entrenador, luego de un paso prácticamente nefasto como estratega por el Deportivo Mandiyú (¿no lo conoce? Yo tampoco, pero aquí lo conocí) y Racing de Avellaneda.

Luego de la estrepitosa derrota por 6-1 ante Bolivia y la más reciente caída ante Brasil por 3-1, comenzaron a aparecer esos fantasmas de renuncia. De hecho, ya hay algunos hinchas en Argentina (incluyo a algunos periodistas) que están pidiendo la cabeza del entrenador de la Albiceleste.

Ahora, hay algo que no me entra en la cabeza. ¿Por qué Maradona no le puede sacar un rendimiento adecuado a un equipo plagado de estrellas? ¿Por qué los Messi, los Agüero y los Tévez no rinden tal y como lo hacen en sus clubes? Sería una tontera pensar que le están haciendo la cama a uno de los máximos ídolos, no sólo de Argentina, si no que del mundo entero. Pero aún no tengo respuesta para eso.

Y ahora, ¿qué pasará con la clasificación al Mundial? Argentina está a 2 puntos de los que están en el quinto lugar (Colombia y Ecuador) y ve como los que están más lejos en la tabla se le acercan peligrosamente (Uruguay y la sorprendente Venezuela). Incluso, los medios argentinos ya están especulando que necesitan una ayudita de sus compatriotas Gerardo Martino y...adivinen quien...¡Marcelo Bielsa!, para poder llegar al Mundial de Sudáfrica y, de pasadita, ir a hacer safari, que tanta falta les hace para poder relajarse un poco, después de 3 años de altos y bajos (más bajos que altos, en todo caso).

¿Da para pensar que Argentina podría estar, después de tanto tiempo, fuera de una cita mundialista? Yo no sé. Por ahora, lo único que podría pensar es que Maradona está pagando los platos rotos de un proceso irregular de Alfio Basile. Por ahora, sólo les queda pensar en su próximo duelo contra Paraguay.

Y si quieres, Diego, te presto la calculadora. Te aseguro que la vas a necesitar.